Entre al baño de la escuela rápidamente ya que tenía unas ganas inmensas de orinar. Azoté la puerta de un golpe y rápidamente utilicé el mingitorio más cercano.
Si, fue rápidamente porque para orinar no me bajo el pantalón ni me desabrocho el cinturón, si no que utilizo la abertura de mi boxer y el ziper de mi pantalón (no en ese orden). Eso me ahorra probablemente 10 segundos. Ese tema, lo tocaré luego.
Al hacer tanto ruido al entrar, alguien ubicado en el retrete piensa que es el momento oportuno para disfrazar una flatulencia con el sonido que yo produzco. No fue así.
En el momento que dejé de hacer ruido, se escucha un aire fuerte, rasposo, potente, de esos que se resguardan por pena, por miedo, por no hacer temblar las ventanas.
Yo lo escucho y hago lo único que puedo hacer para ayudar a un hermano en esa situación. Me empiezo a lavar las manos, utilizo jabón y al final, pongo mis manos debajo del secamanos automático "power 3000".
El ruido que produce es inmenso, tanto que no se escucha nada más en el baño ni fuera de el.
Es tu momento buen hombre, sácalo todo.
Esa fue mi acción del día.
izkwzjr.
No hay comentarios:
Publicar un comentario