Ya había tomado una decisión: despedirnos, dejarnos y estar mejor.
¿Por qué no se siente bien?
Mis ojos hinchados están cansados, mi pecho se siente vacío y tan lleno a la vez, lleno de todo ese amor que siento por ti y ahora, está atorado dentro... Lo siento presionando mi pecho, queriendo subir por mi garganta para escapar, para decirte que no es nada sin ti, pero no lo dejo ir.
Me niego.
Me niego a aceptar que es la decisión correcta, ¿Cómo terminas algo que quieres tanto? ¿Cómo terminas algo que se puede arreglar? ¿Cómo dejas de estar con alguien con quién sí quieres estar?
Y así, como balde de agua fría, mientras escribo este texto me llegó la respuesta.
¿Que si cómo termino algo que quiero tanto? Pues con ese mismo amor... Dejándolo salir de mi pecho, que salga todo, completamente, para que pueda cubrirme a mí. Que me proteja, que me ayude, que me limpie todo lo que tenga que limpiar, que me cure todo lo que tenga que curar, que me ame todo lo que tenga que amar.
Los días serán difíciles, las noches aún más. Los fines de semana serán una tortura y las festividades algo imposible, pero si uso mi amor, de la manera correcta, todo va a estar bien.
Siempre.
-Isaako Tapia.