domingo, 26 de junio de 2011

rastrillo.

Me acuerdo que cuando estaba pequeño, siempre que miraba una película donde un papá le enseñaba a su hijo a rasurarse me emocionaba y no podía esperar a que mi papá me enseñara como rasurarme correctamente. Siempre era lo mismo, el niño se ponía crema para afeitar y le decía a su papá que lo rasurara, el papá con una sonrisa en la cara pasaba el rastrillo por los lugares donde había crema para afeitar sin pegar la navaja a la cara de su hijo para no cortarlo, eliminandola y diciendo algo así como: "Vaya que tenías mucha barba".

Las películas son una completa mentira. Recuerdo que una vez, después de ver muchas películas con esta escena, agarré la crema para afeitar y me la puse, fuí con mi papá y le dije bien contento: "Oye, enseñame a rasurarme", mi papá con una sonrisa en la cara, me miró y me dijo: "Pero si ni siquiera tienes barba" y no hizo nada más. Creo que de ahí en adelante empecé a odiar esas escenas en las películas, eran una mentira, es como cuando te subes a un elevador y hay una mujer super buena y no tiene sexo contigo, y comprendes que el porno también es falso.

Aprendí a rasurarme solo y la verdad es una de las cosas que más odio porque tengo la piel demasiado sensible y nunca aprendí a rasurarme correctamente, siempre estoy cortándome o siempre me quedan unos pelos muy notorios.

Afortunadamente (casi) no me crece barba.

izkwzjr.

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